LA MAQUINARIA REPRESIVA
Gentileza Represores Cubanos
Un estado totalitario como el cubano no solo emplea la violencia física para aplastar a sus opositores. Contra ellos además existe una permanente campaña para el asesinato de su reputación y un esfuerzo coordinado y vasto para bloquear sus posibilidades de prosperidad y las de sus familiares.
Un estado totalitario como el cubano no solo emplea la violencia física para aplastar a sus opositores. Contra ellos además existe una permanente campaña para el asesinato de su reputación y un esfuerzo coordinado y vasto para bloquear sus posibilidades de prosperidad y las de sus familiares.
Las instituciones del estado controlan de manera directa todos los campos de actividad. Para obtener un empleo o ser promovido a un puesto superior se requiere de su beneplácito. Para trabajar en un negocio propio se necesita su autorización. Para acceder a estudios superiores hay que evidenciar conformidad con el estatus quo.
El sistema legal no está diseñado para proteger los derechos de los ciudadanos frente al estado sino para proteger los intereses estatales frente a las protestas ciudadanas. Todos los medios de información escrita, radial o televisiva son suyos, bloquean las mismas informaciones y trasmiten los mismos mensajes. Con ellos -bajo la orientación de la policía política- se puede asesinar fácilmente la reputación de cualquier disidente.
En esas circunstancias la máquina de represión es mucho más amplia que la representada exclusivamente por la policía política, las fuerzas militares y las brigadas paramilitares. En esta sección podrán encontrar estudios, libros y artículos que explican cómo opera ese vasto engranaje de terror.
Informe de la Comisión Cubana para la Reconciliación Nacional
LA MAQUINARIA REPRESIVA DE CUBA ( INFORME HUMAN RIGHTS WATCH – 1999):
INVESTIGACIÓN ARCHIVO CUBA :
Muertes y desapariciones documentadas causadas por la revolución cubana. (trabajo en desarrollo). Actualización del 31 de diciembre de 2015.
Libro:
El Asesinato de la Reputación – Por Juan Antonio Blanco.
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